Una escapada siempre se puede hacer o se debe de hacer, aunque ande uno un poco liado, es bueno para la mente y el cuerpo.
Tan solo hice alguna fotografía medianamente decente, a las especies que suelo ver con cierta frecuencia.
Entre ellas estaba el Cormorán grande Phalacrocorax carbo, me he dado cuenta que no suelo poner muchas fotografías de esta ave que me gusta mucho; debe de ser algo psicológico, como disimulando que los hay, para contrarrestar, que los pobres bichos siempre están señalados, perseguidos y tiroteados.
Tan solo hice alguna fotografía medianamente decente, a las especies que suelo ver con cierta frecuencia.
Entre ellas estaba el Cormorán grande Phalacrocorax carbo, me he dado cuenta que no suelo poner muchas fotografías de esta ave que me gusta mucho; debe de ser algo psicológico, como disimulando que los hay, para contrarrestar, que los pobres bichos siempre están señalados, perseguidos y tiroteados.
El Ánade real Anas platyrhynchos, abunda y en algunos lugares es fácil de fotografiar; nunca soy capaz de pasar de un ejemplar si lo tengo cerca, aunque la luz en algunos de esos momentos no invite a la fotografía.
Este otoño e invierno, para mi esta siendo la temporada del Rascón europeo Rallus aquaticus, es curioso como he pasado a verlos de refilón, como mucho había conseguido alguna imagen lejana y ahora llevo una temporada en la que se acumulan las fotografías.
Con las últimas luces sobre la Ría veo otra especie habitual que la puebla, ya recoge los bártulos, es el Homo fotograficus; es un buen momento y decido hacer lo propio.
Hola Miguel, preciosa entrada esta, las tres primeras son geniales, la primera la cabeza un poco desenfocada por el movimiento que estaba haciendo la ave, pero me gusta, la última espectacular, una panorámica del lugar preciosa, con un ambiento espectacular, te felicito. Un abrazo.
ResponderEliminarQué bonitas fotos, Miguel. Precisamente ayer, en una orilla llena de encinas del Júcar, me sobrevoló un cormorán curioso. Muy bonito y negro él.
ResponderEliminarUn saludo.
Sana envidia de quien no tiene ni una foto (ni buena ni mala) de un rascón (y el oído taladrado de sus lastimeros quejidos, pero no se dan ni con merucu...)
ResponderEliminarHola Salvador, la verdad es que le hice toda una serie al cormorán y las hay mejores de foco; no sabría decir exactamente por lo que me quedé con esta para el blog, tal vez que me gusta la pose o el movimiento. De la última podría decir que es de esas difíciles, la luz frontal y muy baja quema un poco el centro en el primer plano, también me gustó. Gracias y un abrazo.
ResponderEliminarSi Guillermo, son aves realmente hermosas; una de las acciones más entretenidas y espectaculares es cuando golpean con las alas el agua, en una especie de ritual de baño. Aunque las imágenes más habituales sean en las que están con alas extendidas secando, tienen un montón de posturas, muy de foto.
ResponderEliminarIván, el próximo día que vayas a la Ría, miras en una zona inundada que hay con carrizos; yendo por la pasarela desde Misiego al camping, al menos sobre las cuatro de la tarde casi siempre los veo. Se ve que incluso hay gente que se acerca a fotografiarlos (por los caminos en la vegetación); la presencia humana la toleran bastante bien desde la pasarela. Y en esto como en todo, hay rachas. Un abrazo
ResponderEliminarExcelentes fotos....el rascon que guapa, y el azulon ,por muy vista siempre bella ave y de cada escapadica y foto siempre sacas algo positivo.La ultima invita a ir ahora mismo....
ResponderEliminarSaludos camperos!
Gracias Campero, como bien dices siempre se saca algo positivo. Saludos
ResponderEliminarHola Miguel, en primer lugar encantado de conocerte; no caí en la cuenta de quién eras hasta que vi esta entrada en tu blog.
ResponderEliminarUna pena que se nos escapara el Martín Pescador, pero bueno, este año al menos hay siempre al menos una pareja por allí, por lo menos siempre que voy la encuentro. Así que habrá más intentos...
Tb. tienes otros martines en la charca de carrizos que mencionas y a veces tb. se posa en el barco que esta siempre en la playa, enfrente a donde se observa el águila pescadora.
Por cierto, los senderos que mencionas tengo una buena noticia; en parte son humanizados, pero por otra parte tb. se deben a las nutrias, ando detrás de ellas y el día 12 caminado por la pasarela encontré huellas, así que bajé por allí y encontré más huellas y excrementos.
la próxima vez os saludo!!!
Me he enamorado perdidamente del pato. Besos.
ResponderEliminarHola Juan, encantado de conocerte igualmente; algunas veces soy un poco despistado, poco a poco nos vamos conociendo todos por coincidir en un sitio u otro.
ResponderEliminarYo creo que el Martín de esa zona, siempre me provoca un poco y lo hace con saña; se pone más o menos cerca (un día demasiado cerca incluso) y cuando intento enfocarlo se va, para mi es la parte divertida de la fotografía. El lugar en el que yo estaba, era para arrastrarse por el suelo para intentar librar unos arbustos; aunque voy con ropa para tirarme, demasiados excrementos por la zona.
No tenía idea de lo de las nutrias, estaré atento.
Un placer
Gracias en nombre del pato y en el mío Salomé Besos
ResponderEliminarPreciosas todas Miguel,pero el ánade con la gota es genial.
ResponderEliminarUn saludu.
Gracies Xurde Un saludu
EliminarLos patos del paseo de la Villa se comportan como en un parque, son fáciles. Gracias y saludos
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