Me habían advertido que
el Buitre negro Aegypius monachus era
difícil de ver, al
estar en el interior del Parque que no se podía visitar;
unos pinos solitarios albergaban
un nido que alguien me mostró, después el verlo durante varios días
fue fácil. La primera fotografía está tomada con el telescopio, el
resto con el tele.
Este
grandullón que anda por los metros de envergadura, me proporcionó
buenos momentos.
Muy
abundante en diversos roquedos que visité, el Roquero solitario
Monticola solitarius,
la verdad es que daba la impresión de que nadie miraba para él;
para mi, fue una de las satisfacciones de estas vacaciones.
Fotografiarlo
bien, me resultó imposible, pese a las numerosas fotografías que le
hice.
Las
fotografías del Picogordo Coccothraustes coccothraustes, son de una zona de umbría y no
está el ave en su momento más esplendoroso; como este no es un blog
de fotografía, siempre priorizo el mostrar la naturaleza.
De
ese pico se dice que puede generar más de cincuenta Kg de fuerza y
partir una semilla de cerezo, yo de vosotros no lo intentaría.
Impresiona siempre el buitre negro, yo nunca lo he visto en el nido y tiene que ser una experiencia de las que se quedan grabadas para siempre.
ResponderEliminarUn poco lejos pero con el telescopio se veía bien, es una gozada. Saludos
EliminarYo tampoco he visto nunca al Buitre negro en el nido. Por lo visto, el viaje a Monfragüe ha dado sus buenos frutos yme imagino que la experiencia habrá sido de lo más gratificante.
ResponderEliminarSaludos
La primera vez que vas a un lugar es de aprendizaje, hoy lo haría de otra manera Aún así estoy feliz del viaje Saludos
EliminarAlgo parecido sentí yo la vez que fui, mientras todo el mundo dirigía su mirada hacia los buitres y yo andaba todo emocionado con los roqueros. Al picogordo también le tenía ganas y me habían dicho que eran abundantes y confiados, pero no nos cruzamos. Saludos.
ResponderEliminarLos pequeños también me gusta verlos Gracias y saludos
Eliminar