Las lluvias caídas durante aquellos días hacían que las aguas del embalse presentasen un color arcilloso, se mezclaba con el gris de las nubes dominantes y por un pequeño claro se filtraban los rayos del sol; el resultado daba un aspecto de líquido dorado a la superficie donde resaltaban las ondas originadas por un Pato cuchara que ajeno a la plasticidad del momento, seguía con su proceso incansable de buscar invertebrados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Es apreciado cualquier comentario que sea respetuoso con las demás personas.