El poliqueto

El otro día, mientras me encontraba paseando por la playa de la Isla, me encontré con estas curiosas formaciones, son pequeños tubos construidos de arena gruesa y conchas cementadas.

El responsable de estas formaciones de arrecife es un poliqueto,  como me contó César ,  posiblemente se trate de Sabellaria alveolata. Lo llamaremos el gusano en el resto del texto.

 

Si os fijáis en la disposición de los tubos que forma, vive en colonias y estas se parecen a un panal.

Los gusanos segregan un pegamento que utilizan  para pegar los granos de arena debajo del agua, lo hacen en condiciones, no pensar que el oleaje cantábrico acaba con sus construcciones. Una ínfima cantidad de ese pegamento (se requerirían unos 50 millones de gusanos para llenar una cucharadita), reacciona con el agua salada y cementa las partículas arenosas.

En un futuro no muy lejano, los estudios de este gusano, de su pariente Phragmatopoma californica, mejillones, ostras, percebes u otros que producen colas bajo el agua, pueden ser fundamentales para fabricar adhesivos biocompatibles de aplicación en medicina.

Como tantas otras veces, nuestro futuro irá ligado a la biodiversidad y de esta dependerán muchas de las soluciones futuras a nuestros problemas. El respeto y la conservación de esa riqueza natural que nos rodea, por ínfima que sea, la deberíamos de defender con uñas y con dientes.

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