Después de caminar todo el
día por la montaña sin rumbo fijo, mirando en cada recodo, como quién busca
algo que ha perdido, encontré un espectáculo de luces y sombras al que me
rendí. Sentado en una loma dejé que me alcanzase la oscuridad y el frío, mientras,
el horizonte con sus colores cálidos absorbía
mis pensamientos.
Impresionantes esos rayos colándose entre el naranja de las nubes.Es muy buena.
ResponderEliminarSaludos.
No se si me gusta mas la foto o el parrafo que has escrito....
ResponderEliminarSaludos camperos!
Me alegra que os guste, fue un buen rato de un cielo cambiante y precioso; pocas más fotografías hice ayer que al cielo, pero mereció la pena el paseo.
ResponderEliminarGracias a los dos y saludos.
Fantástica "foto de Dios", como dicen mis amigos cuando hago este tipo de fotos. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarSupongo que en la antigüedad se verían este tipo de fenómenos con otros ojos e incluso daría para todo tipo de presagios. Gracias y saludos a los dos
ResponderEliminarHola Miguel he descubierto tu blog gracias a Medioambiente.org me parece muy interesante y las fotografias de una gran calidad, ya tienes un seguidor más,con tu permiso, un saludo Lolo
ResponderEliminarHola Lolo, ya había visto tus fotografías y blog, buen trabajo; te seguía sin permiso ;) Un saludo y gracias
ResponderEliminarEn efecto encontraste algo que la mayoría de seres humanos han perdido. Es cuestión de iluminación... Abrazos.
ResponderEliminarSobre todo encontré un momento de paz y tranquilidad, la contemplación y el dejar los pensamientos fluir. Abrazos y gracias Salomé
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